- Área: 657 m²
- Año: 2017
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Fotografías:José Hevia
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Se plantea una nueva pista deportiva de skate como una plaza más, una oportunidad más de crear ciudad también. A pesar de contar con un presupuesto mínimo, se aprovecha este nuevo equipamiento de skate para transformar el ámbito de un antiguo circuito de atletismo en un nuevo parque público abierto para toda la población. Aprovechando la naturaleza urbana del skate, el proyecto ambiciona estructurar el espacio adyacente más allá de lo estrictamente edificado para cumplir su función deportiva. Aun siendo un deporte ahora olímpico, se aborda el proyecto justamente desde su compatible presencia habitual en el espacio público, desde la realidad de su práctica mayoritaria en las plazas y calles de las ciudades.
Desde esta perspectiva, se realiza un estudio de campo de aquellas plazas y espacios públicos urbanos que precisamente han convertido a Barcelona en la meca internacional de este deporte, como una suerte de efecto colateral e inesperado a la famosa transformación Olímpica y sus “plazas duras”. Se incorporan como material de proyecto obstáculos reales de “street” o “calle”, inspirados en Barcelona, incluyendo réplicas de las plataformas del Parque de les Tres Xemeneies en el Paral.lel, los planos inclinados de Arco de Triunfo o los bordillos de granito del MACBA.
La nueva pista deportiva se concibe expresamente como una PLAZA, una SKATEPLAZA. Se construye con materiales habituales de urbanización del espacio público: Pavimentos de calle peatonal, bordillos de granito macizo, etc. Una urbanización que se extiende a su entorno inmediato, convirtiendo sus rampas y planos inclinados de hormigón en taludes vegetales que integran la pista con el entorno. Se proyecta una línea de árboles que proporciona sombra a la pista, define visualmente el espacio de parque y establece una nueva fachada verde para el entorno industrial del emplazamiento. El pavimento del nivel superior de la skateplaza -cota +0,70m- sirve además, en relación al parque, como un posible nuevo escenario para eventos o conciertos y para el festival anual Rock’n’Board, organizado por los skaters locales.
Se ha cuidado especialmente la no aparición de grafitis o rincones mediante los taludes, evitando paramentos verticales e eliminando la necesidad de barandillas de protección. Los grandes bloques de granito se encargan de cerrar sutilmente el perímetro del espacio patinable.